
Siempre creímos que los paisajes estaban ahí, siempre esperándonos ¿verdad? Eso ha sido así siempre, bueno o casi siempre. Hemos pisado tantos caminos, recorrido tantas historias, adoquinando nuestros sueños con abrazos y besos.
Seguras de que éramos lo que habíamos dicho, lo que habíamos vivido lo que habíamos sentido, pero no siempre. En ocasiones me recuerdo observando el caminito que mi mano dibujaba en tu espalda, la caricia, el abrazo y el susurro, mientras algo me decía, esto no puede ser para siempre.
Me sentí cómplice de algo, de algo bello, de algo eterno, con un para siempre, una sonrisa y un abrazo. Quiero reconstruir tiempos para no rehabilitar recuerdos, para preservar que el paso del tiempo, el dolor y el miedo, no haga que cierre los ojos, fuerte, fuerte, fuerte y me pierda el recuerdo que se acerca para susurrarme un siempre, mientras contrata solo instantes.
Siempre que enorme suena, tan enorme como implacable pero lo de siempre, no siempre es siempre, porque los hilos del pasado se tejieron varias veces, los enredaron con embustes e incluso, pero en ocasiones, solo prendidos con la verdad nos dejan más líjenos, livianos y libres, no importa el motivo lo que importa es retomar con amor, ofrecer tus manos libres para darle tu hombro y decir, vamos a seguir en pié.

Precioso… no siempre es siempre. Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Otro abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona